Thursday, September 21, 2006

las horas y no la vida


la caricia es un modo de ser del sujeto en el que el sujeto, por el contacto con otro, va más allá de ese contacto… lo acariciado propiamente hablando no se toca. No es la suavidad o el calor de la mano que se da en el contacto lo que busca la caricia… la caricia no sabe lo que busca.

en lo desordenado de las caricias hay la confesión de un acceso imposible, de una violencia fracasada, de una posesión rechazada. Hay también el ridículo trágico del simulacro del comer en el beso y el mordisco. Como si se equivocase uno en la naturaleza del deseo, confundido primero con el hambre que busca algo, y se descubriese entonces como hambre de nada. El otro es precisamente esta dimensión sin objeto.

la caricia es la espera de ese puro porvenir sin contenido. Es en este sentido que las caricias no profesan método alguno ni apuntan a otro fin que el acariciar...

2 comments:

Anonymous said...

“ A los mayores les gustan las cifras. Cuando se les habla de un nuevo amigo, jamás preguntan lo esencial sobre el mismo. Nunca se les ocurre preguntar: ‘¿Qué tono tiene su voz? ¿Que juegos prefieren? ¿Le gusta coleccionar mariposas?’ Pero en cambio preguntan: ‘¿Qué edad tiene? ¿Cuántos hermanos? ¿Cuánto pesa? ¿Cuánto gana su padre?’ Solamente con esos detalles creen conocerle. Si les decimos a las personas mayores: ‘He visto una casa preciosa de ladrillo rosa, con geranios en la ventana y palomas en el tejado’ jamás llegarán a imaginarse cómo es esa casa. Es preciso decirles: ‘He visto una casa que vale cien mil pesos’. Entonces exclaman entusiasmados: ‘¡Oh, que preciosa es!’. “



Antonie de Saint-Exupéry, El principito.

.. y por esto y mucho mas, aun no entiendo ¿porque la gente no es mas simple?....

Killen said...

jejejejeje

yo, yo... te quiero